jueves, 26 de marzo de 2020

Dibujo de figuras mejoradas. Cabezas, manos y pies.

Una vez hemos practicado el dibujo del desnudo humano con fotografías, en apuntes de diez minutos de duración, conviene no dejar de practicar, sobre todo cuando nos estamos iniciando en la figura humana.

He aquí una interesante colección de manuales de dibujo de la figura humana, gratuitos en línea.  https://issuu.com/search?q=DRAWING%20FIGURE 


Lo ideal, naturalmente, sería practicar del natural, con personas que se presten a hacer de modelos para nuestros dibujos, pues el modelo en tres dimensiones nos plantea problemas más interesantes que la fotografía del mismo: está vivo, se mueve, respira, lo vemos tridimensionalmente (percibimos una imagen con el ojo derecho y otra con el izquierdo), podemos elegir dónde ubicarnos para dibujar (nuestro punto de vista), podemos encajar y componer la figura dentro de nuestro formato, sin vernos forzados por la composición congelada y estática de la imagen fotográfica. Otra opción es acudir a ejemplos de la historia del arte.

Es IMPORTANTE que elijamos nuestros propios modelos (pueden ser de fotos o de personas reales). Y en el caso de las cabezas, que exista un orden en la colocación de las posiciones...
Por supuesto, no se trata de calcar, ni mucho menos de copiar las láminas que vienen de ejemplo en esta publicación. Seamos originales, elijamos lo que queremos dibujar y démosle nuestro carácter personal.

Así pues, es bueno continuar dibujando la figura humana. Pero antes debemos practicar sobre pormenores esenciales para humanizar nuestros dibujos y que los seres humanos no parezcan maniquíes sin expresión. Es esencial prestar atención a la estructura y la posición de la cabeza, las manos y los pies.

El primer ejercicio consiste en dibujar cabezas en la mayor diversidad de posiciones posible (entre 19 y 25).
Para ello es útil guiarnos por un orden en la disposición de las estructuras de los óvalos. Observemos cómo la línea-ecuador que pasa por las pupilas, y divide horizontalmente la cabeza, va curvándose conforme a la perspectiva que requiere cada pose. Lo mismo sucede con las líneas-ecuador que dividen la cabeza siméticamente en vertical y frontalmente en la parte del rostro y la de la nuca.  
A continuación se muestran algunos trabajos donde, en algunos casos, se han seleccionado fotografías con las posiciones buscadas.




Para el ejercicio de las manos y el de los pies, realizaremos el estudio de al menos diez posiciones de manos y otras diez de pies. Atendamos primeramente a la estructura de estos elementos, a cómo se dividen las partes de la mano, y se alinean en abanico los nudillos y las divisiones de los dedos.
En el caso de la mano, vemos cómo hay aproximadamente la misma distancia desde la muñeca hasta los nudillos, y desde éstos a la punta del dedo corazón. La longitud de la primera falange es aproximadamente la misma a la suma de las otras dos. El dedo pulgar, visto por la palma, coincide con el arranque del dedo corazón, y visto por el anverso de la mano, llega a la mitad de la primera falange del dedo índice.




A continuación se muestran trabajos de estudios de manos y de pies.


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